Traficante de ideas - Abrimos el telón
¿Puedes creer que el último mail que te mandé fue el año pasado?
Ya sé, hice trampa pero con todo y eso no puedes negar que el tiempo pasa muy rápido. Así que, no hay plazo que no se cumpla, hemos llegado al 7 de enero, una fecha en la que hace 34 años comencé mi vida extrauterina, por lo que lo primero que quiero compartirte es una carta (resumida) que me escribo desde que cumplí 12 años, dicha tradición nació como una especie de diario que luego se convirtió en anuario, lo hago para recordar(me) todo lo que pasó mientras la tierra giraba en su movimiento de translación.
Dejando ir...
Querida Fer de otra línea de tiempo:
Quiero contarte que este año aprendí a dejar de esforzarme, quizás es porque me vi muy influenciada por el libro “Effortless” de Greg McKeown o quizás simplemente porque había pasado los últimos 33 años esforzándome por todo, pero no me malentiendas, no es que ahora me la pase echada en el sillón, simplemente aprendí que estaba viendo la vida como una cuesta arriba y ahora la veo como una cuesta abajo, de tal modo que, ya no tengo que esforzarme al máximo por ir empujando (lo que sea que estaba empujando), ahora simplemente le doy un empujón y el efecto bola de nieve hace lo suyo.
Si tuviera que ponerle una etiqueta a este puñado de 365 días se llamaría “Deja”:
Deja que la gente se enoje.
Deja que te critiquen.
Deja que todo se derrumbe.
Lo que está destinado a irse se irá de todos modos.
Lo que tenga que ser, seguirá siendo.
Demasiado esfuerzo, nunca es buena señal…
Lo que se va, siempre deja espacio para algo nuevo, así que simplemente DEJA.
En otras noticias...
Pensamiento sistémico
Mucho de lo que hago tiene que ver con solucionar problemas en las compañías, este 2021, el principal problema tenía un patrón en común sin importar el tamaño o giro de la compañía, su nombre: falta de “enganchamiento” por parte de los colaboradores.
Y es que por más que ames tu trabajo, no te culpo por no sentirte enganchado, lo que nos ha ocurrido y nos sigue ocurriendo no es algo para lo que estábamos preparados, sobre todo, a nivel sistema.
Es por eso que una de nuestras áreas de servicio con más demanda fue justo la consultoría y el desarrollo de innovación alrededor de este tema y una de las cosas que hicimos fue desarrollar una serie de herramientas de pensamiento sistémico, entre las cuales hay una tarjeta (porque convertimos esto en un juego) que se llama “Emergencia”.
Y no, no hablamos de la emergencia con esa conotación de urgencia, sino del resultado natural de las cosas que se unen, de cómo la vida emerge de elementos biológicos individuales de formas diversas y únicas.
Un simple ejemplo de emergencia es un cenote. Se forma a partir de factores ambientales y elementos biológicos muy particulares. De hecho, se forma por el colapso de cuevas formadas durante periodos muy largos de tiempo, cuando la profundidad de la haloclina (formadora de cuevas) permanece por mucho tiempo más o menos en la misma posición, ensanchando galerías y pasajes.
Con este ejemplo lo que trato de evidenciar es que los resultados emergentes surgen de las cosas dispares y, a menudo, extrañas que encuentras en el mundo o en las organizaciones.
Desde esta perspectiva, las cosas más grandes surgen de partes más pequeñas y esto a menudo pasa desapercibido en las compañías en donde se tiende a no valorizar lo que pasa “más abajo” de los mandos gerenciales, lo que ocurrió con la pandemia es que esas cuevas que se formaron a lo largo de los años, se derrumbaron y aunque de primera impresión parace una crisis, es la potencial formación de un cenote, de nosotros depende que sea así.
Todo que ver...
Nathy Peluso
Vi este video sobre Nathy Peluso y quería compartirlo contigo, sobre todo porque hay una parte que me resonó:
“Nunca pensé en el precio de una vida que tuviera la creatividad como principal motivación y donde todo mi trabajo estaría regido por el arte. Pero es un camino digno, porque si no hubiera hecho esto, no sé si podría hacer otra cosa”.
I feel you sister!!!
Para reflexionar...
Hacking de sueños
Me encanta cazar patentes, señales, tendencias y muchas cosas. Esta semana (cada martes lo hago), publiqué algo respecto al “hacking de los sueños”, en síntesis es algo así como la película de Inception, llevado a la vida real. Marketeros queriéndose anunciar hasta en nuestros sueños.
Si no lo viste, te dejo el hilo acá:
Libro...
Permiso para sentir…
El Dr. Marc Brackett , Ph.D. y Fundador y Director del Yale Center for Emotional Intelligence tiene un libro que es una joya “Permission to Feel”. Primero, tengo que decir que su misión de enseñar inteligencia emocional es muy inspiradora. Él comparte cómo “la inteligencia emocional es la capacidad de reconocer, nombrar, comprender y regular nuestros sentimientos, en lugar de permitir que las emociones fuera de control influyan sin pensar en nuestras decisiones, acciones y relaciones”.
Dentro del libro se habla del marco RULER y su proyecto con el mismo nombre para enseñar inteligencia emocional y social en las escuelas. Les recomiendo echar un vistazo a su trabajo.
Si quieres el libro, da clic aquí para saber más, pero shhh, es secreto.
Antes de que te vayas...
❤️ Si algo de esto te provocó un cosquilleo, ayúdame a traficar con más mentes más curiosas. ¡Nos vemos la semana que viene!